viernes, 23 de noviembre de 2007

Tomecino de corazón

El cuento es claro: HAY QUE SER TOMECINO DE CORAZÓN! Porque para las personas tomecinas, que viven acá, están viviendo todo el rollo que pasa con el cuento de la Fábrica de Bellavista, y digo cuento porque hasta el momento nadie les dice nada y todos se pasan la pelota, pero los que están afuera, les diré de una manera bien sutil: la reverenda ........
Pero quiero ser imparcial, una porque no cacho mucho el cuento de las enormes cifras que se contradicen y se necesitan para seguir laburando, y la otra porque me entero solo por la T.V. y los comentarios de copucha QUE EN TOMÉ SON LÍDERES. La fábrica de bellavista más que una fuente de vida para los obreros tiene su que yó. Recuerdo que cuando uno viajaba para Concepción en tiempos de Liceo, bien temprano, pleno invierno, sonaba como una campanilla muy de obrero que avisaba la hora de entrada (o de salida), se les veía caminar por las calles cuando el 80% de la gente aún hacía tutito. O cuando en febrero tenías que ir al centro de ventas para comprar género para tu jumper o blazer que TENÍA que tener la etiqueta "Bellavista Oveja Tomé", o aún más ¿Quién no se a cobijado abrazadito a su frazadita plomita, color del burro de la Fábrica? No sé....encuentro que la fábrica tiene su historia, su caché y también es triste pensar que se acabará, es parte de acá, es como si se secara el Morro...no puede ser!
Entiendo eso sí. que están cayendo en el error por conseguir algo de muy mala manera, pero trato de justificarlo solo pensando que la desesperación los está cegando. Ruego a todos los santos que esto se solucione, y de manera favorable para la fábrica, porque sin ella, y con una montonera de trabajadores desempleados y fustrados, en Tomé se vá a respirar otro aire...Imaginen que a fin de mes empieza la Teletón, ¿cuantas chauchas vamos a dar en total como comuna, si los trabajadores piensan en ahorrar porque no saben que vá a pasar mañana? o que a fin de año todos comprando regalos, cachivaches y chucherías para todos....y ellos? osea...igual es triste...hay que ponerse en los pantalones del otro de repente, dejar de mirarse el ombligo y pensar en el que está al frente... si pueh...Pero insisto, para entender la pena y la angustia:

¡¡HAY QUE SER TOMECINO DE CORAZÓN!!

PD: Saludos a mi amigo Mario (Gusi) que está con el poto a dos manos......